lunes, 11 de abril de 2011

A mi Papà ...






Papá eres mi refugio con corazón de roble inquebrantable
el que construyó el nido, siendo tú el pilar fundamental,
el maestro tenaz y comprometido en la escuela de la vida
El guerrero valiente que con cara dura, cuál escudo de acero
esconde detrás bondad, ternura y a un gran amigo y confidente.


Tus canas reflejan el camino recorrido,
pero no por ello has perdido la sabiduría y
la rectitud de tus palabras, que aún me guian,
amando la verdad y despreciando la injusticia,
cumpliendo con mis deberes siendo honrada y noble ante la vida.


A mi paso por la vida mil veces he escuchado :- ¡Todos los hombres son iguales ! - Gracias a ti Papá sé que no es así, sé que existen hombres como Tú que se tragan el llanto, callan sus dolores, son fieles a un solo amor, aveces recogiendo espinas pero siempre regalando flores.

Papá dices que tu hora está por llegar, yo creo que te falta mucho aún, tus hijos y yo en lo personal no hemos acabado de pagarte, lo que en pequeños pagos te hemos dado de cariño, no te vayas Papá, dame otra oportunidad de pagar mi eterna deuda contigo.



¡Te Amo Papá eres el amor de mis amores!